sábado, 17 de enero de 2009

cajas de resonancia...

¿Cuáles son las particularidades de la política diplomática de Obama?...
Obama ha dejado en pie el éxito alcanzado en la organización de un buen equipo de trabajo que se compone de “élites” de los círculos político y militar de EEUU. Los miembros de este equipo se caracterizan en común por tres puntos. Primero, son veteranos que han prestado durante muchos años serivios en la política del país y son peronas muy experimentadas; segundo, poseen una cualidad profesional bastante alta; y tercero, están dotados de gran capacidad de trabajo y de espíritu pragmático y de la doctrina del medio. Sin embargo, hay quienes cuestionan a este equipo por su excesiva sofisticación y por sus criterios independientes, y es posible, dicen, que sea difícil de coordinar y manejarlos. Sin embargo, Obama sostiene que a su lado es necesario contar con “personas de firme personlidad con puntos de vista diferentes”, y no “cajas de resonancia”, a fin de favorecer el despliegue de debates políticos. Y señaló que después de un debate exhaustivo sobre la orientación política del país el presidente es el que hace la decisión final, y los miembros del equipo sólo juegan el papel de ejecutores de la política. Agregó que a pesar de los diferentes criterios políticos, tienen “ideas sabias más o menos idénticas” en materia de los objetivos de la política exterior de EEUU. Entonces, ¿cuáles son los objetivos de la política exterior del Gobierno de Obama? Lo más esencial es defender la seguridad del país, reparar la imagen internacional de EEUU y conservar el liderazgo norteamericano en el mundo. En concreto, persigue el objetivo de mejorar las relaciones norteamericanas con sus aliados, retirar cuanto antes de Irak las tropas norteamericanas, luchar contra el terrorismo, prevenir la proliferación nuclear, prevenir la derrota, y hacer frente al cambio climático. Según algunos analistas, en comparación con la política diplomática de Bush, la diplomacia de Obama tiende a pragmatismo, cuyos fines principales son diluir la ideología y resolver problemas. Por ello no ligará el terrorismo con la religión, desechará los términos como “fascismo islámico”, no promoverá la democracia y el cambio de régimenes de otros países por medio de las fuerzas. También hay analistas que sostienen que la diplomacia de Obama diluirá el unilateralismo, conferirá mayor importancia al multilateralismo y la cooperación con las organizaciones internacionales como la ONU, atenuará la amenaza militar, y destacará aún más la solución de problemas por medio diplomático. Se puede considerar como uno de los síntomas al respecto la elevación por parte de Obama al embajador norteamericano en la ONU al nivel ministerial de su gabinete. Si bien Obama ha expresado su voluntad de mantener a EEUU como la mayor potencia militar del mundo, y no ha comprometido el abandono completo de las fuerzas para resolver los problemas nucleares de Irán y de Corea del Norte, ha reiterado su disposición a sotener diálogos sin condiciones previas con los dirigentes de los llamados países hostiles como Irán, Corea del Norte y Cuba. A juzgar por sus declaraciones recientes, Obama destacará aún más el recurso del poderío de software, promoverá la construcción civil y la coordinación entre gobiernos, y consolidar la influencia norteamericana pro medio de combinar el poderío de software y el de hardware. Indicó: “Debemos movilizar todos los factores esenciales del poderío norteramericano – las fuerzas militares, la diplomacia, la inteligencia, la legalidad, la economía así como el valor moral – para restaurar la imagen internacional de EEUU y defender su papel en el mundo. Ha nombrado a Hillary como secretaria de Estado, y esto, al parecer, ha teñido de cierto color de halcón a su política diplomática. Pero esto es precisamente lo que persigue Obama. Trata de cambiar la impresión de que el Gobierno demócrata no es suficientamente firme en la seguridad nacional y en la política diplomática. Pero el mantenimiento de Robert Gates como secretario de Defensa y el nombramiento del generaljames Jones como asistente de la Seguridad Nacional indican con mayor claridad la intención de Obama en la política exterior. En una serie de discursos, Gates manifestó que no se identifica con el cambio de regímenes de otros países por medio militar, y sostuvo que sólo valiéndose de los medios militares es difícil ganar la victoria en Afganistán. Promueve la coordinación y la cooperación entre los diversos departamentos del país y por medio integral de ayuda y la restauración económica e institucional, para apoyar a países como Afganistán. Esto concuerda con el deseo de Obama. A juzgar por todo lo arriba expuesto, es muy posible que la política exterior de Obama se caracterice por el “pragmatismo” y el “camino del medio”....(Pueblo en línea).......saludos......paz, paz y amor-paz....
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